Este año que acaba de terminar he tenido la suerte de poder despedirlo en tierras astures. Tras 11 días recorriendo este pedazo verde de España no puedo menos que sentirme muy afortunada por estos días compartidos con gente tan noble como la asturiana. Y es que Asturias no sólo es famosa por su paisaje, sino también por la calidez de su gente, afables, generosos, nobles, hay muchos adjetivos para describir a los asturianos.
También he podido ver todo ese repertorio que forma parte del tópico asturiano: escanciadores de sidra, gaiteros, señoras con sus madreñas en el campo, vacas asturianas con sus cencerros, caballos asturcones, hórreos y paneras que van salpicando esta tierra cuyo paisaje parece sacado de un cuento antiguo.
En poco tiempo he tenido la suerte de callejear la elegancia de Oviedo y Gijón, de visitar la bonita ciudad con soportales de Avilés, de asombrarme ante la fuerza de un mar bravo en Salinas o Cabo de Peñas, recorrer las bonitas villas de Cudillero, Luarca, Candás, Luanco o la famosa Ribadesella.
Asturias es tierra de mar y montaña, de pescadores, ganaderos y mineros, y también de emigrantes. Me ha resultado muy interesante leer las historias de tantos que cruzaron el océano en busca de una vida más próspera y que eligieron Cuba como principal destino para hacer fortuna. Estos inmigrantes, algunos conocidos como indianos, dejaron un magnífico legado arquitectónico repartido por toda Asturias, testimonio de aquellos tiempos en los que aún se podía soñar con hacer Las Américas.
Me voy con la impresión de que he visto mucho pero aún me queda tanto por ver. Asturias es para recorrerla, saborearla, amarla. El lema de Paraíso Natural no es un mero cliché, quien quiera disfrutar del campo, de la montaña, de mar y ciudad y sentirse como en casa debe venir a Asturias. Yo por lo pronto sólo sueño con volver y seguir maravillándome ante tanta belleza.
Bueno, querida e incansable viajera, me encantó tu artículo, tus instructivos «posts» siempre superan a los brochures de turismo. Pero esta vez me quedé con ganas de más . . . . ¿por casualidad no habrá una segunda parte para deleite de tus seguidores? Un beso, Pondelí
jajaja, pues sí, habrá más, es que no he tenido mucho tiempo que digamos.
besitos